En Grupo Oleomex y Oleofinos, nos enorgullece colaborar con Grupo Bimbo, no solo como proveedores de aceite de palma de alta calidad para sus operaciones, sino también como socios estratégicos en el fortalecimiento de la cadena de suministro agrícola. Conscientes de los desafíos que enfrenta el cultivo de palma a nivel mundial en función de la región, nos complace compartirles más detalles sobre el contexto mexicano y el trabajo que realizamos en conjunto con los pequeños productores de palma en nuestro país.
En México, el cultivo de palma de aceite genera un impacto positivo en términos sociales, económicos y ambientales. Esto se debe al arduo trabajo realizado para convertir en una fortaleza la principal debilidad del sector agrícola mexicano: el bajo rendimiento de los cultivos. Éste, está estrechamente relacionado con la fragmentación de la tierra, donde el 95% de los productores son pequeños propietarios con menos de 20 hectáreas y la mayoría ha optado por cambiar sus parcelas agrícolas y ganaderas, al cultivo de palma.
Para ilustrar el impacto de este cambio, en 2014 México producía en promedio 1.2 toneladas de aceite de palma por hectárea, mientras que algunos países vecinos bajo las mismas condiciones agronómicas producían 4.3 toneladas de aceite por hectárea. Esta diferencia en la productividad se debe principalmente a las mejores prácticas agrícolas a las que tienen acceso los grandes productores, como la aplicación eficiente de nutrientes, análisis de suelo y foliares, el uso de semillas mejoradas para nuevas plantaciones, el control de plagas, las podas y la reincorporación de materia vegetal al suelo.
En 2022, México alcanzó un incremento del 138% en obtención de aceite de palma, con un promedio nacional de 2.86 tons aceite/hectárea (357,595 Tons en 124,826 hectáreas productivas). Este incremento es el reflejo de 8 años de trabajo en la implementación de buenas prácticas en el cultivo de Palma Aceitera.
Además de incrementar la productividad de las hectareas, es importante resaltar que esto tiene un impacto positivo en los ingresos y el nivel de vida de las comunidades del sureste, reflejándose en aumento del empleo y la reducción de la migración, contribuyendo al desarrollo socioeconómico de la región. Gracias a los pequeños productores se ha impulsado la producción nacional de aceite de palma. Su perseverancia y dedicación son testimonio de los beneficios que la industria palmicultora puede brindar a México.
Al igual que en cualquier actividad agroindustrial, el sector palmero mexicano enfrenta grandes desafíos. Sin embargo, a pesar de las adversidades, los beneficios son mucho mayores. Por lo que en conjunto con el resto del sector palmero, se definieron objetivos para producir aceite de palma sostenible; mediante el fortalecimiento de los pequeños productores, su integración a las cadenas de suministro y el incremento de los rendimientos, con lo que se produce más aceite con la misma área de siembra (Beneficio ecológico), se incrementan los ingresos (Beneficio económico) y se aumentan la distribución de los ingresos (Beneficio social), creando así, círculos virtuosos sostenibles.
Los resultados que hemos obtenido, como proveedores y partners de Sustentabilidad de Grupo Bimbo, nos dan impulso a seguir en el camino de abastecer palma sustentable que impulse el desarrollo de pequeños productores. Queremos que nuestras prácticas sean un modelo a seguir para otros sectores agrícolas del país y compañías, y acompañar a Grupo Bimbo en seguir Alimentando un Mundo mejor.